En resumen, hoy la educación democrática debe incorporar el aprendizaje-servicio como una de sus notas de identidad más relevantes. No puede quedar como una experiencia interesante que de vez en cuando llevan a cabo las escuelas, debe convertirse en el núcleo de la educación democrática. 

Pedagogía de la acción común, Josep M. Puig Rovira, 2021, pág. 13

 Debemos tener esa mirada escéptica y esperanzada al mismo tiempo hacia la política que resulta de haber entendido lo importante y limitada que es.

Decálogo para comprender la política, Daniel Innerarity, La Vanguardia, 8/4/23.

 Oye, qué interesante la formación sobre Aprendizaje Servicio en la que estuve. El caso es que estoy dándole vueltas… El Parlamento de Navarra tiene un programa de visitas para Secundaria… pero es un rollo; muy institucional: recepción de la Presidenta, asistencia a un pleno… ¿Se podría hacer algo de Aprendizaje-Servicio?

Esta reflexión, allá por 2017, del profesor Eduardo Ortiz, del colegio Claret Larraona (Pamplona), planteaba un peculiar reto: no solo cómo evolucionar de una visita más bien protocolaria a un proyecto ApS, sino cómo pasar de la incidencia política (elemento habitual en muchos proyectos) a que la propia política fuera el centro de la experiencia.

Y bien, ¿por dónde empezar? Seamos metódicos: ¿hay alguna necesidad social ahí sobre la que el alumnado (4º ESO) pueda actuar con vocación transformadora? ¿Quizás combatir la mala imagen, el descrédito, del ejercicio de la política?

Se llegó al siguiente planteamiento: que investiguen sobre qué percepción hay en su entorno (familia, amistades, vecindario…) sobre el ejercicio de la política y sobre las personas que se dedican a esa actividad, transformemos la visita protocolaria al Parlamento en una jornada de convivencia con parlamentarios y parlamentarias, veamos qué sale de todo ello y si los chicos y chicas pueden hacer algo de utilidad social.

Este es el arranque del proyecto En ayuda de la política, en el que el alumnado acabó organizando un acto público en el Parlamento de Navarra, cuyo acto central fue una mesa redonda compartida junto a los principales representantes de los partidos políticos navarros, con la finalidad de acercar a la ciudadanía el ejercicio de la política y combatir el descrédito generalizado que habían hallado en su investigación. En ayuda de la política quedó finalista en los Premios Aprendizaje Servicio 2018, con mención de la Fundación Princesa de Girona (FPdGi).

El curso siguiente el reto creció. ¿El descrédito es exclusivo de la política o la desconfianza ciudadana y la crisis institucional afectan a múltiples actores de nuestra sociedad? Así, en Por una sociedad más fuerte y cohesionada, se amplía el proyecto anterior a 37 instituciones de la sociedad: además de los partidos políticos, se incluyeron los medios de comunicación, organizaciones empresariales y sindicales, la iglesia, las universidades, la banca, la justicia, el ejército…

El alumnado, organizado en equipos de trabajo, investigó las diferentes instituciones, entrevistó a sus principales representantes y elaboró más de 150 propuestas que trasladó a la sociedad a través de una revista y un gran acto público.

Por una sociedad más fuerte y cohesionada obtuvo el 2º Premio Ayuntamiento de Pamplona 2018 al diseño de proyectos ApS y fue también Premio Aprendizaje-Servicio 2019 al empoderamiento juvenil otorgado por la FPdGi.

Curso 2020/2021. Los años de la pandemia. Tiempos difíciles para la sociedad y también para la política. Se emprendió el proyecto Vacuna de valores. Multiproyecto, en realidad, en el que se aborda desde la ayuda de emergencia ante necesidades acuciantes que se estaban dando hasta un profundo trabajo con múltiples actores sobre cómo debería ser nuestra sociedad post pandemia.

En una de las líneas de este proyecto se detecta que la crispación política ha ido en aumento y se propone un Código ético del buen ejercicio de la política y el compromiso ciudadano, que se traslada a las instituciones y partidos políticos y también a la sociedad. Este proyecto obtuvo también el Premio Aprendizaje Servicio 2021al empoderamiento juvenil de la FPdGi.

Y llegamos al curso 2022/2023, al final del cual se vislumbran elecciones autonómicas y municipales. A partir de todo el trabajo de años anteriores se ha acabado creando un taller de política y sociedad en el colegio, en el que el alumnado de secundaria y bachillerato participa voluntariamente, cuya base es la experiencia y materiales de los proyectos de cursos anteriores.

Echando la vista atrás, se percibe con inquietud que el descrédito que se intentó combatir en los inicios de este itinerario no solo no ha disminuido sino que se ha agravado, con el añadido de una preocupante crispación y polarización en los partidos políticos.

De ahí surge la propuesta de un código ético, unido a un compromiso ciudadano, que se presenta a los portavoces en el Congreso de Diputados y es firmado por las personas que optan a la alcaldía de Pamplona y una representación de la sociedad civil (a este acto corresponde la foto de portada).

Aquí algunas repercusiones que este proyecto tuvo en prensa:

  • Diario de Navarra: Siete candidatos a la alcaldía de Pamplona y un código ético del colegio Larraona https://bit.ly/3K52TMd
  • El País: El código ético de unos escolares de Pamplona para los candidatos del 28-M: “Prometo combatir la polarización” https://bit.ly/3nGdSUQ

Todos estos proyectos representan una original línea de trabajo en ApS con el objetivo de formar al alumnado en cultura democrática y de intentar transformar la sociedad en esa línea. Proyectos que obtuvieron gran reconocimiento.

Pero había una espina clavada: Si hay un tema que incide de lleno en nuestra sociedad y política navarra, y también en la española, un tema que provoca ruptura social, dolor y enfrentamiento político polarizado es, sin duda, los efectos del terrorismo de ETA y sus consecuencias personales, sociales y políticas.

Se cumplían en el otoño de 2021 diez años del cese definitivo de la violencia anunciado por ETA y, según un estudio de la Universidad Pública de Navarra para el Gobierno de Navarra, toda aquella etapa resulta desconocida para el alumnado de secundaria. Sin embargo, nuestra sociedad está profundamente condicionada por aquello.

En El final de ETA. ¿Y ahora, qué? Un relato de vivencias se buscó, con ambición, un doble objetivo: que el alumnado tuviera un profundo conocimiento de lo sucedido en aquellos años, a partir de los testimonios de más de treinta personas que expusieron sus vivencias de primera mano, y, segundo, que fruto de ello lanzaran a la sociedad sus propuestas de futuro desde la mirada de unas personas jóvenes no condicionadas.

Un proyecto delicado, difícil, que había que llevar con mucho tacto. Con evidente riesgo de caer en manipulaciones interesadas, pero que sorprendió a propios y extraños por la claridad, vehemencia incluso, con la que el alumnado expuso sus valientes conclusiones, interpelando rotundamente y con profundidad a todas las personas asistentes al multitudinario acto final del proyecto.

El final de ETA. ¿Y ahora, qué? Un abismo de dolor (proyecto en realización, curso 2022/2023) ya está teniendo amplia repercusión en medios:

Empezábamos citando al profesor Josep M. Puig y acabamos haciendo mención a la rúbrica de autoevaluación de proyectos de aprendizaje-servicio del GREM que, en el dinamismo de sentido del servicio, establece, abreviadamente, en su cuarto nivel: Transformador: Los participantes dan respuesta a una necesidad y son conscientes de su dimensión social, pero además perciben los límites de cualquier servicio que no considere la acción política.

Siendo las experiencias de Aprendizaje-Servicio un ejercicio activo de ciudadanía comprometida, nos cuestiona dicho dinamismo si en los proyectos no habría que valorar siempre la posibilidad de incluir algún tipo de actividad de incidencia política, poniendo de relieve la necesidad social en relación a la responsabilidad política correspondiente, ya que a menudo, la acción política y las políticas públicas son la única manera de paliar de verdad las necesidades sociales (Rúbrica GREM).

Esto supondría, más allá de señalar responsabilidades, una forma de hacer conscientes, tanto a participantes en el proyecto como a la sociedad, de la importancia del ejercicio de la política –de sus posibilidades y limitaciones- y una dignificación de dicho ejercicio, en contra de lo que es demasiado habitual en nuestra sociedad y que tiene como consecuencia la crisis institucional y el surgimiento de populismos y extremismos.

En definitiva, una contribución a tener esa mirada escéptica y esperanzada al mismo tiempo hacia la política que resulta de haber entendido lo importante y limitada que es, según la cita de Daniel Innerarity del comienzo.

Los proyectos expuestos quieren ser una humilde contribución en esa línea.

Eduardo Ortiz Piquer. Profesor del departamento de Historia y Ciencias Sociales del Colegio Claret Larraona (Pamplona).

Eduardo Fernández López. Proclade Yanapay ONGD. Red Navarra de Aprendizaje y Servicio Solidario

 

 

 

 

Aprendizaje-Servicio

Aprender haciendo un servicio a la comunidad.
En este apartado encontrarás información, aclaraciones, reflexiones, bibliografía, experiencias, vídeos y diversos documentos que te ayudarán a profundizar en el concepto de aprendizaje-servicio.

*Los contenidos que siguen proceden de la web www.roserbatlle.net

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